El acompañamiento de la mujer durante esta etapa tan especial y única de su vida es vital por lo que ha de ser un trabajo multidisciplinar. De este modo la mujer se llena de información, se le da seguridad, tranquilidad, contribuyendo a la mejora de su estado físico y mental, reduciendo el estrés y la ansiedad sobre la nueva etapa que llega.
Un fisioterapeuta especializado en la salud de la mujer imparte siempre las clases en grupos reducidos de dos mujeres, intentando siempre que los grupos sean lo más homogéneos posibles. Las clases se adaptan a todo tipo de mujeres, sedentarias, físicamente activas o incluso deportistas de élite previo embarazo.
La práctica de actividad física y ejercicio durante el embarazo tiene una fuerte evidencia científica. Pudiéndose realizar desde el primer trimestre si las condiciones de la mamá y el bebé son óptimas y si su matrona y obstetra así lo deciden también.
En las sesiones no solo trabajamos la capacidad aeróbica de la mujer, sino también su fuerza y resistencia, su faja abdominal (minimizando la posibilidad de tener diástasis abdominal patológica tras el embarazo); el suelo pélvico, fortaleciéndolo para evitar dolores e incontinencias no solo en el embarazo sino también en el postparto; preparando a la mamá para el parto con ejercicios de movilidad pélvica y posturas de dilatación.
La evidencia científica dice que las mujeres que se mantienen físicamente activas durante el embarazo:
- tienen menos posibilidad de tener un parto instrumentalizado (fórceps, ventosa, cesárea)
- llegar al final de la gestación y con un bebé con normopeso.
- desarrollar patologías en el postparto (diástasis abdominal, prolapsos, incontinencias urinarias…)
- bajo nivel de estrés fetal
- menos posibilidad de desarrollar diabetes gestacional, HTA y preclamsia.
- menos percepción de dolor en el momento del parto
- trabajo de parto más corto (dilatación)